La angustia de un padre arrepentido

Soy de Perú de ciudad de Tingo Maria. Soy padre soltero de cuatro niños y tenía dos hijos a mi responsabilidad uno de cuatro y mi otro hijito de ocho años. Cometí el gran error de cambiarles la vida aceptando un trabajo en Hong Kong que era rentable para mejorar la situación económica de mi familia.

 

Resulta que fui contratado por un conocido de mi ciudad para venir a hacer un trabajo en Hong Kong, para recuperar un trabajo que ellos habían hecho a base de droga, la cual fue enviado de Perú.

Nuestra libertad es lo más hermoso que tenemos para disfrutar de nuestra familia y de poder ver a nuestros hijos crecer y llenarnos de bendición y ver la vida de colores en nuestro hogar.

Antes de yo salir del Perú, uno de los dueños del dicho trabajo me enseñó cómo debería recuperar la droga que se encontraba camuflada en ese trabajo. Luego de hacer el trabajo, ellos por no pagarme me entregaron a la policía. Sin importarles nada de lo que pasaría con mis hijos y conmigo me dejaron abandonado aquí y ahora estoy pagando las consecuencias de esa mala decisión por querer conseguir el dinero de la noche a la mañana. Lo más triste de todo esto y lo que me remuerde la conciencia, es de haber dejado a mis dos hijos con mi madre, perjudicándoles en sus estudios, en su seguridad.

Me duele en el alma haber arruinado la vida de mis hijos de esa manera.

Un consejo

Yo les aconsejo de corazón a las personas que quieren cometer el gran error de hacer esos trabajos y transportar drogas, no lo acepten. No nos beneficia en nada, al contrario perjudicamos la vida de los demás y la de nosotros mismos.

Piensen en sus familias, en sus hijos como les destruimos sin darnos cuenta. Tratemos de cambiar las cosas, empecemos por nosotros ¿cómo?, diciéndoles “no” a los que nos quieren controlar. Pues de esa manera no podrán trasladar sus productos para ninguna parte y así estaremos evitando que muchos la consuman, y poco a poco cambiaremos el mal por el bien.

¡Si! El dinero nos hace falta a todos, pero ganémoslo de la manera correcta. Llevemos el pan a nuestras familias por el esfuerzo de un trabajo digno y limpio para poder disfrutar lo que ganamos y sentirnos orgullosos y con la conciencia limpia. Lo que fácil llega fácil se va.

Yo estoy pagando una condena muy dura aquí en Hong Kong. Por favor no vengan a Hong Kong, las penas son muy duras y es triste estar lejos de nuestra familia. Cortemos las alas al narcotráfico diciéndoles ¡NO! a sus propuestas. Ayudémonos nosotros mismos a vivir en paz y con la conciencia limpia.

Nuestra libertad es lo más hermoso que tenemos para disfrutar de nuestra familia y de poder ver a nuestros hijos crecer y llenarnos de bendición y ver la vida de colores en nuestro hogar.

Piensen mil veces antes de aceptar. “NO A LAS DROGAS” aconsejen a sus amigos y familiares.

Dios les bendiga y llene de amor sus hogares, trabajos y familiares.

”NO MÁS MULAS”

Nota: Esta carta ha sido editada. Se han hecho correcciones gramaticales y de ortografía para mejorar la redacción de la misma. Lea más sobre su historia en Un cálculo con todas las de perder y La puerta que nunca debes abrir. Vea también detalles de la redada de su captura el 12 de Noviembre de 2017 en Hong Kong  (en inglés)